Marcel·lí Antúnez

Internacionalmente conocido por sus performances mecatrónicas y sus instalaciones robóticas. Sus trabajos se han presentado en numerosos festivales, galerías, museos y teatros de todo el mundo, como la Villette de Paris, el l.C.A. de Londres, el FILE de Sao Paulo, el DAF de Tokio, el DOM Cultural Center de Moscú, el DEAF de Rotterdam, el Performing Arts de Seúl (Corea), entre otros.

A lo largo de más de 30 años de carrera Marcel·lí ha desarrollado un universo particular en el que han contribuido su interés, entre otras cosas, por el comic, el Art Brut, las vanguardias de los 60'o las tradiciones populares. Un cosmos que lo completa su inclinación por ciertos elementos de la condición humana tales como la alimentación, el sexo o la muerte.

El trabajo de Antúnez tiene el cuerpo como elemento central, se mueve en la esfera del arte de la instalación y la performance, y desde hace más de dos décadas está embebido por la tecnología digital. Durante este tiempo el artista ha desarrollado un procedimiento que denomina con el neologismo de la sistematurgia. El quid de este sistema es la participación del usuario. La sistematurgia, literalmente dramaturgia de sistemas informáticos, se divide en tres ámbitos: interfaz, gestión informática y médium.

Marcel·lí ha recibido, entre otras, las siguientes distinciones y premios: primer premio en Festival Étrange, Paris 1994; Mejor New Media en el Noveaux Cinéma/Noveaux Médias Montreal 1999; Premio Max nuevos lenguajes escénicos, España 2001; Honorary Mention en el Prix Ars Electronica 2003, Premio Ciutat Barcelona en categoria Multimedia 2003, Premio Ciutat de Barcelona en la categoria de Artes Visuales 2014 y el Art Excelence Award 2015 Japan Media Arts Festival.